🔹 Los cuadrantes de Kiyosaki nos mostraron cómo movernos del trabajo al lado de la inversión. 🔹 En mi libro El Juego de la Vida propongo un cuadrante diferente: no sólo financiero, sino existencial. 👉 Cuatro formas de vivir: 1️⃣ Supervivencia – trabajar por dinero. 2️⃣ Seguridad – buscar control. 3️⃣ Propósito – servir y crear. 4️⃣ Libertad – fluir con conciencia. 💡 Reflexión: No se trata sólo de cómo ganas dinero, sino de desde qué nivel juegas tu vida. ❓ Pregunta para la comunidad: ¿En qué cuadrante sientes que estás tú ahora mismo… y hacia dónde quieres moverte? 📖 Si quieres profundizar, aquí puedes descargar la preview gratuita de El Juego de la Vida:

Hola comunidad Viverent 🌱 En mi experiencia, muchas veces lo que más nos transforma no es el dinero en sí, sino una lección clave que cambia nuestra manera de ver la vida. 👉 Me encantaría leerlos: ¿Cuál ha sido ese aprendizaje que más te ha marcado hasta ahora? En mi caso, uno de los mayores fue comprender que el dinero no es la meta, sino una herramienta para vivir desde mi esencia. ✨ Si quieres profundizar en esta visión, aquí comparto la preview gratuita de mi libro El Juego de la Vida: [PDF]

según Robert Kiyosaki, hay cuatro cuadrantes financieros: 1. E – Empleado 2. A – Autoempleado 3. D – Dueño de negocio 4. I – Inversionista La mayoría de la gente se queda en los primeros dos (E y A), o sea, dependen de trabajar para ganar dinero. En cambio, los ricos se enfocan en estar del lado derecho (D e I), donde el dinero trabaja para ti. Ahora, hablando de rentar para vivir, mucha gente cree que rentar es “tirar el dinero a la basura”, pero no es tan simple. Si estás en el cuadrante de inversionista, te das cuenta que no necesitas ser dueño de la casa donde vives para construir riqueza. Puedes rentar un lugar para ti y, al mismo tiempo, comprar propiedades para rentar a otros, que sí te generen flujo de efectivo. Es decir: → Rento donde vivo porque no me ata, no me descapitaliza y me permite moverme si necesito. → Compro propiedades, pero para que me generen ingresos pasivos, no para vivir en ellas. Lo que importa es el flujo de dinero, no la apariencia de “ser dueño”. Tener una casa propia puede convertirse en un pasivo, si no genera ingresos. Kiyosaki lo dice claro: tu casa no es un activo, a menos que te dé dinero. Así que la estrategia es simple: - Rentar para vivir, si eso me da flexibilidad y liquidez. - Comprar bienes raíces, pero como inversiones que me generen ingresos. - Meterme del lado derecho del cuadrante (Dueño / Inversionista) para liberarme del intercambio tiempo-dinero.

Hola soy nueva en el tema de inversión en bienes y raíces, mi pregunta es para quien ya entro a Viverent, pueden vender en unos años? que pasa si yo quiero mi dinero en 20 años? con que garantía puedo vender mis "metros" o "tabiques"????

En el corazón de su obra "El Señor de las Rentas", el empresario e inversionista Luis Ramírez ofrece lo que podría considerarse un manifiesto financiero. En apenas seis páginas cruciales (38-43), Ramírez busca desmantelar las creencias que han mantenido a generaciones atrapadas en la mentalidad del “comprar para vivir”, proponiendo en su lugar una visión más estratégica de la inversión inmobiliaria. Leer este fragmento es como pasar de ver el mundo en blanco y negro a una vibrante alta definición. La transformación mental se desarrolla en tres actos decisivos. PRIMER GOLPE: LA RENTA TRADICIONAL, UN CAMINO SIN SALIDA Ramírez lanza su primer misil contra la idea más arraigada en la cultura latina: la compra emocional de la casa familiar. “No necesariamente tienes que ser el comprador feliz que busca una casa para la familia feliz.” Afirma que el 97% del mercado inmobiliario está diseñado para compradores emocionales, ofreciendo rentabilidades brutas de apenas 2-5%, que al descontar impuestos y gastos se vuelven “prácticamente nulas”. Para los inversionistas, el modelo de renta tradicional —con contratos rígidos, fiadores y alta burocracia— es un callejón sin salida frente al mundo actual de nómadas digitales y flexibilidad laboral. SEGUNDO ACTO: EL ARMA SECRETA QUE TODOS TEMEN USAR Cuando el lector se pregunta: “¿Cómo empezar si no tengo un gran capital?”, Ramírez revela su arma secreta: “Use bank's money”. El miedo a la deuda es, según él, el verdadero enemigo. Enseña a distinguir entre “deuda buena” (apalancamiento para invertir) y “deuda mala” (consumo improductivo). Incluso detalla cómo usar tarjetas de crédito como un experto, pagando siempre el 100% del saldo antes del corte, para demostrar solvencia ante los bancos. “Los bancos son tus socios: ponen el dinero para que adquieras propiedades que se paguen por sí solas.” EL DESENLACE: UN NUEVO MAPA PARA UN NUEVO MUNDO Ramírez rompe con el viejo mantra de “barrios bonitos”. La ubicación importa, sí, pero donde la demanda y la rentabilidad sean más altas. Además, recuerda que el dinero que prestan los bancos es el de los ahorradores que mantienen su capital “seguro” pero sin movimiento.