En la lectura de hoy aprendimos acerca de la identidad.
Los hábitos se mantienen cuando producen satisfacción inmediata.
Como las recompensas a largo plazo tardan en llegar, es clave usar reforzamientos inmediatos (pequeños premios, señales visibles o medidas de progreso) para que el hábito se sienta exitoso desde el principio.
Esto funciona tanto para crear hábitos como para evitar malas conductas (por ejemplo, ahorrar el dinero que no gastas).
Las recompensas deben alinearse con tu identidad y tus objetivos, no contradecirlos.
Con el tiempo, las recompensas internas (bienestar, energía, salud) toman el control y la identidad sostiene el hábito.
Las medidas visuales como la “Estrategia del clip” o un historial de hábitos (no romper la cadena) hacen el progreso evidente, motivador y satisfactorio, aumentando las probabilidades de repetir la conducta.
Idea clave: Lo que se recompensa inmediatamente se repite.
Para que un hábito dure, debe sentirse bien ahora.
También tener un registro de progreso para alcanzar las metas.